Fui a buscarte, y una vez más... no te encontré. Al igual que cada vez que mi corazón corre hacía tu abrazo, y sólo encuentra vacío... un gran vacío que aún, no se ha logrado llenar de tu sonrisa... de tu amor.
Creía que aún quedaban aquellos envoltorios de chocolates que siempre solíamos guardar en aquel viejo cajón... que hoy, tampoco está.
Ya no queda nada de aquello que solíamos cuidar... tampoco han quedado esas pequeñas costumbres que solíamos tener. Todo desapareció, después del día que te fuiste de viaje... todas aquellas pequeñas cosas se fueron con el viento, esa suave brisa de un Agosto que se llevó tu alma.
Sólo tu sonrisa vive en mí...