Suavemente me besó la mejilla, con la misma sutileza que plasmó en mis recuerdos todo su cariño; y nos despedimos. Me di vuelta, caminando hacía la realidad, esbozando una sonrisa por lo vivido; y pude escuchar 'Gracias por todo'... nuevamente, volví mi mirada hacía ella sin temores ni vergüenzas, y le respondí 'Gracias, a vos'. Ambas nos abandonamos, pero con la firme convicción de saber que siempre... volvemos al mismo lugar; ella a otorgarme mi felicidad, y yo... a retribuirle lo que hizo y hace nacer en mi…

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